La historia está basada en un hecho real, la vida de una madre, Miriam Rodríguez Rámirez a quien un cartel de México le secuestró a su hija; es cuando Miriam se convierte en una de las principales activistas de búsqueda de personas desaparecidas.
A lo largo del filme nos habla de cómo el personaje principal, Cielo, inicia una búsqueda de los secuestradores de su hija Laura, sin embargo en el camino su madre se va involucrando con el ejercito mexicano en su afán de rescatar a su progenitora; llevando en la narrativa visual una especie de suspenso y misterio.
La cinta fue llevada al Festival de Cannes 2021, en donde compitió en las catergorías de mejor largometraje en dos secciones: “Una cierta mirada” y “Cámara de oro”, pero eso no fue todo, pues al finalizar su proyección recibió una ovación de ocho minutos de aplausos dirigidos a la producción y a su actriz, Arcelia Ramírez, por parte de los asistentes.
Lo que para la directora rumana Teodora Ana Mihai y el guinista mexicano Habacuc Antonio de Rosario inicio como un documental donde Miriam narraba su historia para hacer justicia, se convirtió en ficción y en cierto modo un método de protección para la propia madre y para fomentar la empatía hacía las demás familias que atravesaban una situación similar.