*Se realizó en la Facultad de Letras y Comunicación el Taller Amigos de las Lenguas Yutoaztecas.
La Facultad de Letras y Comunicación de la Universidad de Colima celebró hace unos días el Taller Amigos de las Lenguas Yutoaztecas, en el que gracias a un intercambio de experiencias e investigaciones se pudo conocer que en Colima siempre ha existido la diversidad lingüística y que tendríamos que conformar una sociedad más intercultural donde todos seamos parte de ella.
Esto lo dio a conocer la profesora de la Facultad de Letras y Comunicación Cecilia Caloca Michel, quien describió en entrevista lo que este encuentro dejó a la comunidad universitaria. Entre sus reflexiones, señaló que tendríamos que conformar una sociedad más intercultural de la que todos somos parte de Colima.
El término yutoazteca designa al “grupo de lenguas amerindias, originarias del sudoeste de los Estados Unidos y del noroeste de México, entre las que destacan el náhuatl, el comanche y el cahíta” (RAE).
Cecilia Caloca aclaró que los pueblos originarios ya no tienen la lengua náhuatl, “sólo algunas actividades hacen que se rescate la lengua”. Sin embargo, sí se preserva la lengua en las comunidades indígenas que migran a Colima para la pizca, la zafra de caña y otras cosechas agrícolas y que se encuentran asentadas en casi 22 albergues.
“La lengua náhuatl no es una mezcla -dice Cecilia Caloca-, hablamos de nahuas, purépechas mixtecos, amuzgos, incluso zapoteco; por ellos sí hay comunidades y lenguas vivas en Colima”. Sobre el Taller Amigos de las Lenguas Yutoaztecas (TALY), nacido en 1970, la profesora señaló que lo integra investigadores que estudiaron también la zona de occidente, incluida Colima
Señaló que no es sólo es investigación lo que realizan, sino que buscan concientizar a la sociedad y visibilizar que en Colima siempre ha existido la diversidad lingüística. En el taller se dijo, agregó Caloca Michel, que a principios del siglo XX se hablaba todavía náhuatl en esta zona, pero debido al porfiriato y a las restricciones que tenían los indígenas con su vestimenta y sus prácticas culturales, se fue desplazando tanto su lengua como su cultura.
En 1981, compartió, el Instituto de Investigaciones Antropológicas de la UNAM registró como en riesgo o en extinción la lengua náhuatl en Colima; “era evidente, pero aún había gente que trabajaba en el rescate, precisamente de algunos cuentos y adivinanzas, y mediante este taller se empezó a gestionar el reconocimiento de la cultura indígena”.
Durante los días 26, 27 y 28 de octubre, el programa del taller abordó los temas de Territorialidad y espacialidad, Evidencialidad y cuestiones fonológicas en lenguas tepimanas, Lengua y cultura, Lengua, cultura y sociedad (virtual), Estrategias discursivas (virtual) y Aspectos sociolingüísticos (virtual)
Entre las investigaciones y publicaciones presentadas, la profesora destacó el trabajo de Álvaro Torres Nila, el rescate de los archivos de Rosa Yañez, el trabajo de Tonantzin Medina sobre la comunidad de Zacualpan, rescatando a través de la cocina el léxico náhuatl.
Sobre el tema de la pertinencia, Caloca Michel señaló que recae en darles espacio a estas lenguas y a sus hablantes y destacó que en la Facultad de Letras y Comunicación han cursado estudios tzeltales, zapotecas, nahuas de la costa michoacana y mixtecos; “son jóvenes que se les tiene que apoyar el doble o triple porque a veces vienen con un no dominio de la lengua española para hacer sus actividades académicas”.
Dentro del programa del taller, dijo, se presentó el libro “Escribiendo desde el occidente colonial: Paleografía, traducción y vocabulario de 20 documentos en náhuatl 1557-1737”, de la Universidad de Guadalajara, en el que se hace un análisis de las regiones de Jalisco, incluyendo Colima, donde se rescatan documentos históricos escritos en náhuatl.
“Ésa es la parte donde Colima tiene mucha riqueza todavía, en archivos, entre ellos una enmienda y votaciones, como la hecha para pedir recursos al comendador, además de otros documentos históricos muy importantes” dijo la profesora.
La Universidad de Colima, informó, ha formado estudiantes en paleografía, y por lo tanto son capaces de leer los documentos, inscripciones y textos antiguos y determinar el lugar del que proceden y el período histórico en el que fueron escritos. Señaló que hay varios egresados de lingüística que trabajan en proyectos paleográficos.
Destacó a la egresada del área de lingüística Cinthia Annel Alcántar Virgen, que presentó su trabajo “Lo metafórico de la sierra náhuatl de Chicontepec, Veracruz, en el poemario Xolo, de Mardonio Carballo”, relacionado con la lengua náhuatl.