Para el control del dengue, zika y chikungunya, la Secretaría de Salud y Bienestar Social aplica tres tipos de larvicida en recipientes que acumulan agua, a fin de evitar que las larvas eclosionen y se conviertan en moscos transmisores.

Al referirse a las tareas de control larvario que se realizan en esta temporada, la dependencia recuerda que éstas se desarrollan en los cinco municipios de riesgo (Armería, Colima, Manzanillo, Tecomán y Villa de Álvarez), sin descuidar otras localidades que han registrado casos.

Señala que en esta labor se utilizan tres larvicidas, dos en polvo (entre ellos el temefos que se ha utilizado en otras ocasiones) y uno en pastillas, a fin de tener una rotación de estos productos y evitar la resistencia a los mismos, logrando una efectividad de 60 días aun con los recambios de agua.

El área de vectores de la se secretaría, indica que es la información de vigilancia epidemiológica y vigilancia entomológica la que marca las pautas de trabajo, según el riesgo que se presenta y la cantidad de larvicida que se debe aplicar, de acuerdo con la capacidad de los litros que almacena el recipiente.

Precisa la dependencia que estos larvicidas son productos aptos para salud pública, recomendados por la Organización Mundial de la Salud, la Organización Panamericana de la Salud y el Centro Nacional de Prevención y Control de Enfermedades.

Finalmente refiere que en estas acciones de control, se trabaja de acuerdo con la lectura de las cinco mil 800 ovitrampas colocadas en los municipios de riesgo, a donde se encaminan las acciones de control larvario en visitas domiciliarias.

Comparte esta entrada
error: Content is protected !!