Por Luis Enrique López Carreón
Dirigente del Movimiento Antorchista en Colima
Un clamor, por lo que sabemos, es un conjunto de voces y gritos proferidos con vehemencia por una multitud, en especial para quejarse de algo, pedir algo o aclamar a alguien. Yo estoy muy seguro que, cuando menos en Colima, el verdadero clamor diario es por la seguridad y la justicia.
Mientras la atención principal del presidente López Obrador y de casi todas las voces de los gobiernos, diputados y personajes políticos principales de casi todos los Estados, giran en torno a los resultados de la “revocación de mandato”, el rechazo a la Reforma Energética, o a la famosa “hazaña” de la “nacionalización del Litio”, en Colima, los muertos por homicidios dolosos siguen aumentando; sólo que ahora, la inocencia probada de los que aumentan en las estadísticas mortales, son más que evidentes. ¡Justicia¡, este es ahora el nuevo clamor que se suma en los colimenses.
El periódico El Economista del día 21 de abril pasado, publicó una nota que refleja bien a bien la causa de la situación que vivimos los colimenses. Dijo así el medio en una de sus notas: “Sin sustento, 57% de los datos emitidos en las mañaneras sobre seguridad”; para luego referir datos de un informe de la Organización Causa Común, quien realizó un análisis de diciembre de 2018 a diciembre de 2021, en el que corroboró, que de las 764 conferencias de prensa que realizó el presidente en ese lapso, en 420 se abordaron temas de seguridad, pero que en ellas, en más de la mitad de los datos que se mencionaron no se dio ningún sustento a las declaraciones. Como vemos entonces, solo verdades a medias o mentiras llanas, es lo que se nos dice en el tema de la seguridad de los mexicanos.
Con todo este abandono presidencial al tema de la seguridad, la lesión social ya alcanzó también a la gobernadora colimense Indira Vizcaíno. Informó así el periódico tapatío El Occidental del día 22 de abril pasado: “Gobernadora de Colima, la peor calificada en percepción de seguridad”; donde afirmó que la Encuesta Massive Caller colocó al gobierno de Colima en el último escaño a nivel nacional en la percepción ciudadana en el tema de materia de seguridad; ubicado en el lugar número 32, con una percepción negativa del 64.5%, a la gobernadora Indira Vizcaíno Silva como la mandataria peor evaluada.
Y por todo lo que ya sabemos los colimenses, esto no podía ser de otra manera. Aunque el pasado 19 de abril, la gobernadora declaró que, “La seguridad es el tema más importante y lo atendemos con seriedad” (adncolima.mx); lo cierto es que los resultados dicen totalmente lo contrario. La columna Jueves Político del periódico Diario de Colima del 21 de abril pasado, nos ofrece un apretado resumen que retrata muy bien la situación que se vive hoy en Colima.
De este importante trabajo rescato hoy, lo que diré a continuación acerca de la violencia e inseguridad que nos mantiene en zozobra a los colimenses.
Veamos. Dice así la columna: “Cuando menos ocho de cada 10 habitantes de Colima y Manzanillo se sienten inseguros; en el primer caso, son más del 85% de los capitalinos, un incremento significativamente mayor en comparación a la percepción ciudadana al cierre de 2021, de 66 por ciento, cifra que en el plano nacional representa el porcentaje de personas que no se sienten seguras en su ciudad.” Aquí vemos cómo el medio tapatío que ya cité, dice verdad cuando muestra la evaluación que de la gobernadora hace la Encuesta Massive Caller.
Sigamos. “Además, marzo ha sido el mes más sangriento de lo que va del año en Colima, pues de los 260 homicidios dolosos, 50 sucedieron en enero, 68 en febrero y 98 en marzo, mientras que en lo que va de abril ya rebasa las 50 ejecuciones.” Esto, mientras nuestra gobernadora ocupa su tiempo y preocupación, en denostar a los diputados federales que votaron en contra de la Reforma Energética del señor presidente López Obrador.
Pero hay más. “La pasada Semana Santa no sólo fue la más sangrienta en la historia de Colima, con 17 homicidios, sino también indignante y aterradora para la población tras los aciagos crímenes, entre los que sobresalen el asesinato a una niña de 13 años de edad, a una profesora y un profesor, a tres jóvenes en un taller y otros inauditos, como el cometido por la misma “autoridad”, un policía que estando franco mató a dos personas tras una riña.” Entonces, ¿“La seguridad es el tema más importante y lo atendemos con seriedad”?
Rescato algo más de lo que dijo el medio que cito. “Son hechos que crispan a la sociedad entera y que, ante la falta de eficiencia de las autoridades para frenar la violencia, hay una indignación creciente que también se registró en la Encuesta de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del Inegi, donde se asentó, que sólo el 21.7 por ciento de los ciudadanos de Colima piensa que su gobierno es efectivo para resolver las problemáticas, es decir, casi el 80 por ciento de la gente considera lo contrario.”
Yo creo, que lo que opina el medio Diario de Colima es cierto, no sólo es de suma importancia para conocer la realidad de lo que vivimos hoy, sino que refleja muy bien lo que sentimos todos los colimenses: decepción. Lo que está pasando en el Estado, no se parece en nada a todo aquello que nos prometieron los que pidieron la oportunidad de gobernarnos. No son mejores tiempos los que está viviendo nuestra Colima. No es esto lo que se buscaba con el cambio.
Coincido en que todo esto es así, porque, como finaliza diciendo el medio: “sólo evidencia una apatía de los gobernantes, tanto de la administración estatal como de las municipales, del Ejecutivo Federal, del titular de la Secretaría de Seguridad Pública, del Fiscal General del Estado y de las distintas corporaciones policíacas, pero además, de la sociedad misma que necesita exigir más a los gobiernos”. Así es, esa es la solución: debemos exigir más a los gobiernos. Que nadie lo olvide.