“Aún recuerdo cuando estabas mirándote al espejo del baño ese día, recuerdo que volteaste a verme y me preguntaste ‘¿Me veo bonita?’ y por hacerte enojar sólo te dije que no, pero no sabes realmente lo hermosa que te veías”, esa es la última memoria que Sarahí Flores tiene de su hermana. Hoy, Leslie ya tiene más de seis años desaparecida.
El 01 de marzo de 2017, Leslie Alejandra salió de su casa ubicada en el municipio de Villa de Álvarez, Colima, para reunirse con una amiga con quien haría un trabajo escolar. Lo último que se supo de ella es que abordó un taxi.
Leslie tenía entonces 24 años y era estudiante de la licenciatura en Derecho, su familia la recuerda como una joven alegre, noble y sociable.
“Salíamos de paseo y a convivir en familia, íbamos al cine, al parque, pero lo que más disfrutaba era de los días de playa. Todo era maravilloso hasta el día que la desaparecieron, no sólo se llevaron a mi hija, también se llevaron mi corazón”, narró con la voz entre cortada Reyes Flores, papá de Leslie.
En redes sociales aún circula su ficha de búsqueda; estatura 162 centímetros, cara ovalada, nariz mediana y respingada, cabello negro ondulado, vestía blusa de manga larga color beige, pantalón de mezclilla rasgado, zapatos de piso y bolsa de mano.
Las autoridades continúan sin tener rastro alguno de su paradero. Sus familiares indican que no pararán hasta encontrarla.
“La omisión y la inacción también es corrupción (…) ¿qué se necesita para mover la rueda de la justicia y encontrar a tantos desaparecidos?”, cuestionó Ana Silva, madre de Leslie.
Hasta diciembre de 2021, la Red de Personas Desaparecidas en Colima informó que en el estado se cuenta con el reporte de mil 700 personas desaparecidas, cifra que aumenta con las víctimas de desaparición de 2022 y 2023.