+ La señal de alarma es un bulto en el cuello, axila o ingle, advierte la dependencia.
La Secretaría de Salud del Gobierno del Estado de Colima dijo que los síntomas del linfoma pueden confundirse con facilidad con algunas infecciones o enfermedades comunes como gripe, por lo que su diagnóstico en sus inicios es complicado, Sin embargo, la señal de alarma es la presencia de un pequeño bulto que no duele en el cuello, axilas o ingle y se toma medicamento y no desaparece.
En el Día Mundial del Linfoma, el Instituto Estatal de Cancerología (IEC) de la dependencia recordó que los principales síntomas de este padecimiento son: dificultad para respirar o tos, infamación de los ganglios linfáticos, dolor o presión en el pecho, sensación de estar llenos después de comer poco, inflamación del abdomen, pérdida de peso, fiebre, sudores nocturnos y mucho cansancio.
El diagnóstico oportuno es fundamental para la curación, ya que 98% de linfomas son curables si se detectan en etapa inicial (1). Ante tales síntomas debe acudirse a un Centro de Salud para descartar cualquier patología benigna infecciosa, y si hay sospecha real, enviar al(a) paciente a un centro especializado, como el Instituto de Cancerología, para estudios de sangre e imagen, aunque el diagnóstico lo da una biopsia o toma del tejido sospechoso.
La dependencia estatal indica que el linfoma es un cáncer que se desarrolla en las células del sistema linfático. Hay dos tipos comunes: linfoma de Hodgkin y linfoma no Hodgkin, que constituye en México el tercer cáncer más común en el sexo masculino y el sexto en el femenino.
En el estado de Colima, cada año se presentan entre 100 y 120 casos del linfoma no Hodgkin en las diferentes instituciones del Sector Salud, y en particular entre 30 y 35 casos en el IEC. Existen más de 60 tipos y sólo 50% son curables, presentándose con mayor frecuencia en personas adultas que en niñas o niños, aumentando las probabilidades de contraer el padecimiento a partir de los 50 años.