“La gestión integral del riesgo consiste en prevenir, reducir y controlar el riesgo de desastre para lograr un territorio seguro, sostenible y resiliente”: Enrique Guevara.
En la inauguración de la Semana Estatal de Protección Civil 2024, realizada en el auditorio de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad de Colima, el director general del Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), Enrique Guevara Ortiz, aseguró que los atlas de riesgos son una herramienta fundamental para prevenir desastres.
Tituló su conferencia: “Importancia de los Atlas de riesgo en la gestión integral del riesgo de desastres. Aplicaciones en los programas de protección civil”. Al evento asistieron académicos, estudiantes e integrantes de la Unidad Estatal de Protección Civil y de la Brigada Universitaria de Protección Civil.
En su intervención, el funcionario federal señaló que los atlas de riesgo son una herramienta fundamental para elaborar los programas de protección civil: “Son el principio básico de la gestión integral de riesgo, así como el punto de partida para llevar a cabo cualquier acción o medida para prevenir, reducir y controlar cualquier desastre”.
Guevara Ortiz explicó que el riesgo se compone de tres elementos: peligros, vulnerabilidades y exposición. Los peligros, dijo, son los fenómenos naturales o antropogénicos que pueden causar daños a la población, la infraestructura y el medio ambiente.
Las vulnerabilidades son las características de una comunidad que la hacen susceptible a sufrir daños por un fenómeno peligroso. La exposición es la presencia de bienes, personas o infraestructura en una zona susceptible de un fenómeno peligroso.
El director del CENAPRED destacó que la gestión integral del riesgo consiste en “prevenir, reducir y controlar el riesgo de desastre para lograr un territorio seguro, sostenible y resiliente”. Para ello, es necesario que todos los sectores de la sociedad, público, privado y social trabajen de manera coordinada.
Como ejemplo de un desastre generado por condiciones preexistentes de la zona, Guevara Ortiz mencionó el ocurrido por los efectos del huracán Otis en Acapulco, Guerrero. “El desastre estaba latente desde hacía 50 años, pero se llevó a cabo una mala planeación del desarrollo y se crearon condiciones de vulnerabilidad, pobreza, marginación y falta de preparación”, comentó.
El funcionario federal enfatizó la importancia de que cada ciudad y municipio cuente con su atlas de riesgo. Estos documentos permiten identificar los riesgos a los que está expuesta una comunidad y además desarrollar acciones para reducirlos.
En el caso de Colima, el CENAPRED ha elaborado ocho mapas de riesgo municipales. Invitó a la población a consultar estos mapas en la página web de este centro nacional.
“En los mapas de riesgo se puede consultar qué fenómenos hidrometeorológicos, geológicos, químico-tecnológicos o inestabilidad de laderas existen en esa localidad. También se puede conocer el grado de vulnerabilidad social, el rezago social, la marginación, la vulnerabilidad ante el cambio climático y la vulnerabilidad de las personas con discapacidad”, explicó.
Guevara Ortiz concluyó su intervención enfatizando la importancia de la prevención de desastres. “Si conocemos los riesgos, tenemos la obligación de gestionarlos. Los riesgos que no gestionemos son desastres anunciados. No hay que esperar a que se materialicen, debemos intervenir antes; cuesta dinero, trabajo y coordinación, pero sí se puede”.