Por Luis Enrique López Carreón
Dirigente del Movimiento Antorchista en Colima
El día martes 9 de julio pasado leí una nota en un medio local algo que, según se dijo, era una declaración oficial de la gobernadora de Colima. Retomo ahora lo esencial de la nota, porque, ante los destrozos carreteros, urbanísticos y demás que seguramente vamos a padecer a causa del temporal de huracanes que azota la entidad, podremos darnos una idea clara de cuál es, en verdad, la preocupación principal que entretiene a todos aquellos que prometieron velar primero por el bienestar de los pobres.
La nota que retomo se tituló así: “Más de 15 mil mdp [millones de pesos] en Corredor Logístico Carretero”; y luego se dijo ahí que la gobernadora Indira Vizcaíno informó que, con respaldo del Gobierno de México y esquemas de participación público-privados, se ha gestionado una inversión histórica por más de 15 mil millones de pesos para modernizar la red de carreteras que atraviesan la entidad, y que constituyen lo que se ha denominado el “Corredor Logístico Carretero del Estado de Colima”, uno de los más relevantes para el comercio internacional que pasa por la República Mexicana” (El Noticiero, 9/7/2024).
La gobernadora precisó además, que el Corredor contempla 6 obras: 1) la conclusión y puesta en operación de la carretera Transvolcánica de 16.5 Km, que ya está en operación; 2) la construcción del Macrolibramiento Sur de Colima, con 28 km y una inversión de 5 mil 294.5 millones de pesos; 3) la ampliación de cuatro a seis carriles en 46 km de la autopista Armería-Manzanillo, con 3 mil 422 mdp; 4) la ampliación de dos a cuatro carriles en 4.7 km del Libramiento Manzanillo, con 1,170 mdp; 5) la construcción del segundo ingreso al puerto, de 2.5 km, con 575.5 mdp; y 6) la ampliación de cuatro a seis carriles en 43.1 km de la autopista Colima-Armería, con 4 mil 970.2 millones de pesos.
Dos cosas más dijo la Gobernadora que conviene precisar: 1) que los vehículos ligeros no pagarán cuota en la autopista y el Libramiento de Colima; “es el propio transporte de carga el que financiará estas obras, pues nos parece lo justo, dado que es por el transporte de carga que se requieren estas ampliaciones y modernizaciones; y 2) que por estrategia presidencial el tramo carretero se concesionó por parte de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT) al Gobierno del Estado, y a su vez este, lo concesionó a un tercero mediante un contrato APP (Asociación Público-Privado).
Con todo esto que ya se sabe, quiero aclarar que de ningún modo puede estar uno en contra de la realización de semejantes “inversiones históricas”; pero, dado que los gobiernos de ahora dicen siempre que pueden, que en el centro de su gobierno está el pueblo pobre, aventuro aquí algunas ideas que tal vez puedan orientarnos un poco más en relación a las verdaderas intenciones de lo que se anuncia.
Primero. Si se dice que, “es por el transporte de carga que se requieren estas ampliaciones y modernizaciones”, está claro entonces aquí, que la “inversión histórica” no se pensó, en el fondo, para mejorar la vida de los colimenses, sino para mejorar las condiciones del traslado de las mercancías de los grandes empresarios que usan el puerto. Además, está claro que el pago de cuotas en la autopista y el Libramiento que hagan los empresarios a través de su transporte de carga, finalmente se lo cargarán al costo de las mercancías que llegarán indefectiblemente a los consumidores. No hay empresario que haga negocios para perder su dinero.
Segundo. Al concesionar el Gobierno del Estado la construcción de las obras a un tercero mediante un contrato APP, en realidad se trata aquí de un lucrativo negocio conjunto entre el Gobierno y los empresarios constructores, solo que, de las ganancias no participaran nunca ni remotamente, los colimenses más desamparados. Nunca, que se sepa, los empresarios van a poner en riesgo las ganancias de sus negocios para compartirlas con el pueblo; al contrario, siempre que pueden, usan las estructuras gubernamentales elegidas por el pueblo para incrementan sus fortunas.
Y tercero. Lo que estamos viendo ahora con esta “inversión histórica”, no es más que la materialización de un viejo proyecto mucho tiempo anhelado por los gobiernos federales y estatales, encabezados por los corruptos fifís y neoliberales del pasado anterior al reinado morenista. Aquí es donde veremos con mucha facilidad, que tan diferentes son los gobiernos honestos de ahora de los corruptos anteriores.
En relación esto, veamos dos notas que se pueden encontrar fácilmente en los portales de internet. La primera apareció el día 18 de febrero de 2017 en el portal ptc.mx (Puertos, Transporte de Carga) y se encabezó así: “Analizan establecer un corredor logístico entre Manzanillo y Texas”, y se dijo lo siguiente: “La Administración Portuaria Integral de Manzanillo, la Secretaría de Fomento Económico y Contecon Manzanillo (TEC II), realizaron una misión comercial a Texas como parte del proyecto de establecer un corredor logístico entre Manzanillo, Laredo y Nuevo Laredo. Durante la reunión, el Director General de la API Manzanillo, Vicealmirante Alejandro Miranda Oceguera, expuso las ventajas competitivas con las que cuenta este recinto portuario y destacó principalmente su ubicación privilegiada, que le permite transportar con un tiempo mucho más competitivo la mercancía hacía la región de Laredo.”
La otra nota la encontré en portalcolima.com (El Portal de Colima), y está fechada el día 19 de septiembre de 2017. El encabezado dice así: “Buscan consolidar corredor logístico Manzanillo-Laredo”, y se informó esto: “El gobierno del estado y el gobierno federal están impulsando de manera conjunta la consolidación del corredor logístico Puerto de Manzanillo-Laredo, lo cual representaría ahorro en tiempo y costos logísticos, y una alternativa para el desarrollo futuro comercial e industrial del Estado. Al participar en el 24 simposium de logística y manufactura, celebrado en la Universidad Internacional de Texas campus Laredo, el secretario de Fomento Económico, Carlos Domínguez Ahedo y el director de la Administración Portuaria Integral de Manzanillo, Alejandro Miranda Oceguera, destacaron las bondades de este proyecto. […] el titular de la Secretaría de Fomento Económico del Gobierno del Estado, destacó que por su posición estratégica el puerto de Manzanillo representa la mejor opción logística en tiempo y distancia para que mercancías procedentes de Asia, lleguen a la costa Este de Estados Unidos y Canadá, vía Laredo. Y es que, mientras el Puerto de Manzanillo mantiene una distancia de mil 303 kilómetros de Laredo, Texas; la opción que representa el puerto de Long Beach, California [por donde actualmente llegan], se localiza a 2 mil 256 kilómetros”.
Hasta aquí las notas. Pero nótese bien, que las instituciones y funcionarios señalados en ellas, eran todos parte de los gobiernos neoliberales de Peña Nieto y Nacho Peralta; el gobierno de AMLO y su partido llegó hasta finales del 2018.
Con todo esto, ya podemos finalizar con una atrevida conclusión: por todo lo que se ha dicho hasta ahora acerca de esta “inversión historica” que se anuncia, no queda claro aún, cómo es que resultarán, verdaderamente y en serio, beneficiados “primero los pobres”. Si los beneficios para los más desamparados en verdad existen, sería conveniente que se dijeran pronto claramente para todos; porque, de lo contrario, entonces los colimenses tendríamos derechos a suponer que todos los gobiernos, digan lo que digan, siempre son lo mismo: un lucrativo negocio para los más ricos.