Por Marina Rodríguez
La noche de ayer, 27 de septiembre de 2021, el Congreso del Estado de Colima aprobó por unanimidad la prohibición de los Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual o Identidad de Género (ECOSIG), mismos que con anterioridad fueron proclamados erróneamente como “terapias de conversión”.
La importancia de prohibir los ECOSIG radica en que las infancias, adolescencias y juventudes de orientación sexual y de género diverso, puedan sentirse más seguras de levantar la voz sin ser sujetas a ningún tipo de tortura por parte de centros, grupos, o ministros que vulneren sus derechos humanos, así lo expresa Alej Pizano, activista e integrante de la población LGBT+.
La iniciativa votada y aprobada la noche de ayer, surge de la necesidad de frenar la desinformación a la que está sujeta la sociedad, y en 2018 defensores de los derechos humanos y LGBTTTIQ+ tuvieron un primer acercamiento con el diputado local Vladimir Parra, quien, aseguró, siempre se ha mostrado abierto y congruente a apoyar sus causas.
“A principios del año pasado empezamos a trabajar la propuesta de iniciativa, que fue trabajada desde las grupas, organizaciones, y colectivas que queremos un cambio real para nuestro Estado; buscamos asesoría jurídica, referencias de otros estados, y en conjunto con el equipo de Vladimir salió esta iniciativa el 29 de junio de 2020”, señaló Pizano.
A casi 15 meses después, integrantes de la comunidad LGBT+ se dicen orgullosos del histórico avance que al día de hoy les garantiza integridad física, psicológica, y emocional, sancionando con horas de trabajo comunitario, y hasta cinco años de prisión, a todo aquel individuo o grupo que lleve a cabo Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual o Identidad de Género.
Asimismo, Alej Pizano hizo un llamado a la unión, lucha y resistencia de lxs activistas de otros Estados de la República, para con ello crear espacios seguros que les permitan continuar derribando barreras de injusticia; “Que el enemigo entienda, no hay nada que curar”, puntualizó.